22/02/2024 - BERLINALE 2024: Meryam Joobeur presenta un logrado primer largometraje, una atmosférica y emocionante obra que mezcla con valentía realismo, onirismo, microcosmos familiar y temática yihadista

Salha Nasraoui y Rayen Mechergui en Who Do I Belong To

“¿Qué ocurre?”. Cuando queremos saber la verdad, pero también la tememos porque nos obligaría a enfrentarnos a nosotros mismos de una forma dolorosa, el riesgo de que la situación se deteriore aumenta. Y cuando el amor maternal, los lazos familiares, la amistad y los recuerdos chocan con una realidad que nos supera, el peligro acecha. Es precisamente en esta zona compleja y nebulosa donde la directora canadiensetunecina Meryam Joobeur ha decidido aventurarse en su primer largometraje, la fascinante Who Do I Belong To [+lee también:
entrevista: Meryam Joobeur
ficha de la película], presentada en la competición de la 74.ª Berlinale.

Extremadamente estilizada, pero anclada en un realismo muy prosaico, la película es la prueba indiscutible de que estamos ante una directora decididamente ingeniosa, que demuestra una gran habilidad para sugerir metáforas sin llegar a desarrollarlas del todo. Coqueteando con los géneros fantástico y de investigación, el miedo y los misterios, la reciente situación geopolítica (Daesh) y la vida pastoril en un pequeño pueblo, la directora nunca pierde el hilo (el amor de una madre y una familia que se enfrenta a dilemas sin precedentes), sino que lo retuerce hasta que la frontera entre el sueño (pesadilla) y la realidad se vuelve extraordinariamente porosa, garantizando un suspense irresistible para el público.

“Si vuelven, irán a la cárcel”. Mehdi (Malek Mechergui) y Amine (Chaker Mechergui), los hijos mayores de Aïcha (Salha Nasraoui) y Brahim (Mohamed Hassine Grayaa), han huido para unirse a Daesh, abandonando a sus padres y a su hermano menor, Adam (Rayen Mechergui), que llevan una vida simple como pastores en el norte de Túnez, muy cerca del mar. ¿Por qué se fueron? ¿Volverán? ¿Están muertos? Para Aïcha, la herida emocional es insoportablemente profunda y una fuente de conflictos (¿de quién es la culpa?) entre ella y su marido, un hombre con un orgullo herido que posteriormente transfiere su afecto al agente de policía Bilal (Adam Bessa), amigo de la infancia de los dos fugitivos. Mientras tanto, a Adam, que sigue ocupado en juegos inocentes, le hacen creer que sus hermanos viven en Italia. Hasta que un día, de forma inesperada, Mehdi reaparece sin su hermano, anunciando su muerte y acompañado de la misteriosa Reem (Dea Liane), embarazada y cubierta con un velo de pies a cabeza. Protegida por Aïcha, la pareja se instala a escondidas, pero todavía no han aflorado todos los oscuros secretos y pronto se producen en la zona fenómenos extraños e inquietantes…

Dividida en tres capítulos (“las consecuencias”, “una sombra emergente” y “el despertar”), Who Do I Belong To destaca sobre todo por su original planteamiento visual, acercándose increíblemente a sus personajes para lograr una poderosa intensidad minimalista (a través de los gestos, las miradas), amplificada por insólitas inmersiones en el mundo natural (el agua, la playa, el mar, los animales, etc.) con las que la directora juega para distorsionar la realidad. Atravesada por poderosas escenas oníricas, la metódica trama (cuyo guion firma la propia cineasta) también incluye flashbacks que nunca revelan demasiado sobre esta obra, sino que mantienen su potencial misterioso. La película se revela al mismo tiempo como un viaje al subconsciente femenino y una parábola sobre perder el rumbo y recuperar la conciencia, por no hablar de cuestiones sociales y políticas más amplias. Protagonizada por una mezcla de actores profesionales y no profesionales, la cinta esconde sus cartas perfectamente hasta el final, gracias a un enfoque cinematográfico de innegable talento que también podría considerarse demasiado astuto (la estilización de la película, llevada al límite, y los elementos fantásticos a veces ofrecen vías de escape muy prácticas). Con todo, en un primer largometraje, un exceso de habilidad nunca puede considerarse una desventaja.

Who Do I Belong To es una producción de la francesa Tanit Films junto con Midi La Nuit (Canadá) e Instinct Bleu (Túnez), coproducida por 1888 Films (Francia), Godolphin Films (Túnez) y Eye Eye Pictures (Noruega), mientras que Luxbox se encarga de las ventas.

(Traducción del francés)

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Meryam Joobeur, Salha Nasraoui, Mohamed Hassine Grayaa, Adam Bessa
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