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BERLINALE 2024 Berlinale Special

Crítica serie: Supersex

por 

- No está claro cuánto de la serie "inspirada en" la vida de Rocco Siffredi es verdad, pero Alessandro Borghi está espectacular dando vida al semental italiano

Crítica serie: Supersex
Alessandro Borghi (centro) en Supersex (© Netflix)

La serie de Netflix Supersex, estrenada en todo el mundo el miércoles 6 de marzo, es un poco como Elvis, de Baz Luhrmann, si esta tratara sobre el rey del porno: un relato estilizado, condensado y totalmente subjetivo de una historia un tanto controvertida y en gran medida imposible de verificar, realizado con la participación de las partes implicadas. Si lo que buscas es la verdad objetiva, probablemente aquí solo encuentres una muestra de ella.

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Trabajando en colaboración con el propio Rocco Siffredi, la creadora Francesca Manieri (Luna Nera [+lee también:
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, We Are Who We Are [+lee también:
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) construye una historia llena de conexiones ominosas y presagios: todo lo que le ocurre a Rocco es siempre profundamente significativo, cada acontecimiento es un hito más en su viaje formativo. Comenzamos al final de esta historia, cuando Siffredi, convertido ya en una superestrella mundial, anuncia repentinamente su retirada del porno en una convención sexual en 2004. No se trata de un truco publicitario: la impactante decisión del intérprete está motivada por las visiones de un hombre supuestamente muerto, su hermano Tommaso (Adriano Giannini). De camino a su habitación de hotel, una azafata le pide al angustiado Rocco que no se retire todavía, ya que ha venido a París con el propósito expreso de acostarse con él. Y así lo hacen, bajo la mirada y los aplausos de los invitados reunidos, Rocco da a su público lo que quiere por última vez.

Se trata de una escena exagerada, ficticia, que ilustra perfectamente la intensidad febril de la serie y la forma en que establece una conexión entre la actividad sexual de Siffredi y su estado de ánimo: el mayor triunfo de la serie podría ser que ninguna de sus muchas escenas de sexo son gratuitas. A lo largo de la serie, los flashbacks nos llevan desde ese momento en 2004 a días anteriores en la vida de Siffredi, empezando cronológicamente desde su infancia en la pequeña ciudad de Ortona en 1974, cuando aún se llamaba Rocco Tano. Con un padre que lo trata con desprecio y una madre crónicamente preocupada, el pequeño Rocco (Marco Fiore) admira a su hermano mayor, Tommaso, que sale con la chica más deseada de la ciudad, Lucia. La ambición declarada de Tommy es “follarse el mundo” (más que un alivio temporal para la miseria, el sexo es su vía de escape). La serie no teme mostrar que la sexualidad no es un mero extra en la vida, sino una parte muy importante de ella. Esto es cierto para todos los personajes, pero especialmente para Rocco, que se ve atrapado desde pequeño en una intensa red psicosexual: entre Lucía y Tommy, que puede no ser su hermano, una madre que le ignora y una sociedad en la que el joven nunca será más popular que el fatídico día en que encuentra una revista guarra. El cómic da título a la serie y, a través de este, el joven Rocco encuentra, al igual que el actor porno que aparece en su interior, su propio superpoder.

El hecho de que Siffredi conociera más tarde a este mismo actor, que le ayudaría en sus comienzos en el cine, es aparentemente cierto, al igual que los demás giros principales de la trama. Sin embargo, otros elementos de la historia están diseñados de forma bastante obvia al servicio de un desarrollo del personaje demasiado ordenado. Esto no supondría ningún problema si se hiciera con más precisión y estilo. No obstante, algunas ideas interesantes, como la disposición de Siffredi a sufrir el comportamiento violento de Tommy, las relaciones del actor porno con la vergüenza o el orgullo de su familia, y sus experiencias de lujuria y amor, se abordan con bastante crudeza. Las grandes afirmaciones, normalmente expresadas mediante voz en off al final de los episodios, anuncian que se ha producido una epifanía o un cambio, cuando los propios acontecimientos del episodio no han logrado demostrarlo de forma convincente.

Lo que nos mantiene enganchados a pesar de todo es la fenomenal interpretación de Alessandro Borghi como un Rocco adulto. Adoptando algunos de los manierismos de la estrella, como su risa, su postura y su expresión general, Borghi interpreta al personaje con una intensidad que en cierto modo sugiere el magnetismo aparentemente legendario de Siffredi. Apoyado por la excelente Jasmine Trinca como Lucia, y con un convincente Saul Nanni como el joven Rocco de 19 años, el dedicado y reflexivo trabajo de Borghi evita milagrosamente que esta serie se desmorone.

Supersex es una producción de las italianas Groenlandia y The Apartment. Los siete episodios de la serie se estrenan en Netflix el 6 de marzo.

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(Traducción del inglés)


Galería de fotos 22/02/2024: Berlinale 2024 - Supersex

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Rocco Siffredi, Alessandro Borghi, Saul Nanni, Francesca Manieri, Francesca Mazzoleni, Francesco Carrozzini, Jasmine Trinca, Matteo Rovere, Adriano Giannini, Rosa Caracciolo
© 2024 Dario Caruso for Cineuropa - dario-caruso.fr, @studio.photo.dar, Dario Caruso

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