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SUNDANCE 2024 Competición World Cinema Dramatic

Crítica: Sujo

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- Astrid Rondero y Fernanda Valadez siguen al hijo huérfano de un sicario en su brillante película, que mezcla con habilidad un relato de paso a la adultez y un retrato social con el cine de género

Crítica: Sujo
Juan Jesús Varela en Sujo

"Marcado por su propia soledad, con la sensación de que se había convertido en una sombra de sí mismo, alguien a quien no se podía ver ni oír". A primera vista, no parece que haya ninguna conexión entre la Inglaterra de finales del siglo XIX de Jude el oscuro, la novela de Thomas Hardy (la cita anterior es de ese libro) y el Michoacán de hoy en día —en la Tierra Caliente de México—, un lugar infestado de narcotráfico y violencia. Este es el escenario de Sujo, la excelente película del dúo formado por Astrid Rondero y Fernanda Valadez, que ha sido presentada en la competición World Cinema Dramatic (donde Valadez ya fue galardonada en 2020 con el premio especial del jurado al mejor guion y el premio del público con su ópera prima Sin señas particulares [+lee también:
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) del Festival de Sundance. Pero aunque los tiempos cambian, los huérfanos que intentan resistirse a un determinismo social asfixiante siguen siendo los mismos y, como Jude, Sujo debe sobrevivir y crecer en un mundo plagado de hostilidad. Es hijo de un "sicario" apodado El Ocho, considerado un traidor y eliminado por un cártel local al que no le conviene en absoluto que el niño de cuatro años se convierta en un hombre y trate de saciar su sed de venganza.

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A partir de esta premisa, que constituye a su vez el tema de la primera de las cuatro partes de la película, las directoras desarrollan una historia fascinante —a la par que realista y dramática— a través de un notable uso del espacio fuera de pantalla con el que se consigue simbolizar la incómoda posición de Sujo a la perfección. Como todos los jóvenes, el protagonista, cuyo entorno amenazador le ha llevado a verse reducido a la invisibilidad, va en busca de un sentido, una identidad, un lugar en la vida.

"¡No puedes pasarte la vida escondiéndote!" Después de que, in extremis, el capo le perdone la vida con la condición de que no vuelva a pisar la ciudad, Sujo crece en la naturaleza, aislado de la civilización con su tía Nemesia (Yadira Perez Esteban), una mujer muy independiente a la que muchos ven como una bruja por sus interacciones con el mundo de los sueños. Lo único que todavía mantiene a Sujo en contacto con el mundo exterior son las visitas de su madre Rosalía (Karla Garrido) y sus amigos de la infancia, Jeremy y Jai. Pero también está el coche que su padre utilizaba en sus tiempos de sicario, un recuerdo que yace enterrado entre la maleza y no hace más que avivar la llama de su deseo de emancipación, y más ahora que Sujo (Juan Jesús Varela) es ya adolescente y Jeremy (Jairo Hernández Ramírez) y Jai (Alexis Jassie Varela) quieren unirse a los cárteles...

Este largometraje tan brillantemente elaborado por parte de las dos cineastas nos lleva hasta Ciudad de México, donde el camino de Sujo se cruza con el de una profesora universitaria argentina (Sandra Lorenzano). Se trata de una historia de paso a la adultez entre la luz y la oscuridad, entre las garras mortales de un México empobrecido y unos impulsos vitales que en ocasiones resultan contradictorios, una trama entretejida con habilidad por unas cineastas que han sabido tomarse su tiempo para crear verdaderas explosiones dramáticas. En la estela de un cine latinoamericano que sabe combinar un retrato cautivador lleno de humanidad, un cuadro socioeconómico edificante, las atmósferas crueles del cine de género y el gusto por el misticismo, Sujo es una obra fascinante tanto en el contenido como en la forma. Astrid Rondero y Fernanda Valadez demuestran tener una evidente facilidad para crear atmósferas intensas y sugerentes a partir de elementos sencillos (una mirada, un rostro, un cielo, siluetas, voces en off, etc.), al tiempo que dominan la complejidad de una larga narración. Sin duda, la extraordinaria riqueza de esta paleta hace de Sujo una película abrasadora y hechizante.

Sujo ha sido producida por la mexicana Enaguas Cine y coproducida por Estados Unidos (Jewerl Ross) y la francesa Alpha Violet, que también se encarga de las ventas internacionales.

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(Traducción del francés)

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