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CANNES 2024 Semana de la Crítica

Crítica: La Pampa

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- CANNES 2024: Antoine Chevrollier firma un delicado y dinámico primer largometraje con un relato de iniciación en el rural francés, a menudo invisibilizado o caricaturizado en la pantalla

Crítica: La Pampa
Amaury Foucher y Artus Solaro en La Pampa

“—Está muy oscuro. —Es simplemente la batalla entre el bien y el mal. El apocalipsis no es el fin del mundo, sino el paso de una etapa a otra, el fin de un mundo antes de que nazca otro”. Tras descubrir un tapiz medieval expuesto en un castillo de Angers, a unos 50 kilómetros de la pequeña ciudad de Longué donde se encuentra en proceso de terminar sus estudios de bachillerato, Willy (Sayyid El Alami), el agradable protagonista de La Pampa [+lee también:
tráiler
entrevista: Antoine Chevrollier
ficha de la película
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(la ópera prima del director francés Antoine Chevrollier, que ha sido presentada en competición en la Semana de la Crítica, en el marco del 77.º Festival de Cannes) no sabe aún, a pesar de algunas señales de advertencia, que su vida cotidiana, su orientación y la percepción que tiene de su entorno están a punto de cambiar radicalmente.

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Las revoluciones del motor empiezan a subir rápidamente en las vidas del mecánico Willy y su amigo de la infancia, el intrépido piloto de supercross Jojo (Amaury Foucher), que no cesa en su lucha por el título de campeón de Francia y entrena bajo el mando de su omnipresente padre (Damien Bonnard) y Teddy (Artus Solaro) en el campo de entrenamiento conocido como La Pampa. Pero estos dos chicos no renuncian por ello a la despreocupada vida adolescente con sus amigos de siempre, y prueba de ello es el hecho de que recorren las carreteras locales a toda velocidad en sus motos, esquivan a la muerte, disparan armas en medio del campo y llevan a cabo internadas nocturnas y clandestinas en la piscina municipal con varias chicas, entre ellas Marina (Léonie Dahan Lamort), que estudia en la Universidad de Angers y ha venido a Longué a visitar a sus padres. “Parece que estemos en plenos años 50, con todos esos rumores y obsesiones por la reputación. Hay que abrir un poco la mente”, comenta la joven. Y, como suele ocurrir en estos casos, las convicciones del joven Willy, que sigue profundamente afectado por la muerte de su padre años antes, van a verse afectadas por los acontecimientos que están a punto de tener lugar…

A través de un argumento sencillo pero eficaz (basado en un guion escrito por el director junto con Bérénice Bocquillon y Faïza Guène), que gira en torno a temas como la rebelión adolescente por la independencia, la confusa transición emocional a la edad adulta y la necesidad de “encontrar el propio lugar”, La Pampa traza un retrato increíblemente ingenioso de la cultura machista en una región donde ir contra corriente nunca es fácil, donde ser gay está vilipendiado, donde las cargas de los padres pesan sobre los destinos de sus hijos, y donde las tendencias a ponerse límites tienen visibles consecuencias sobre los horizontes y el futuro, dando lugar a surcos mentales de los que es difícil escapar. Se trata de una obra sutilmente llena de vida y no ostentosa, una película que se ve realzada por la energía chisporroteante y colorista del supercross, así como por la música de los sumamente talentosos Evgueni y Sacha Galperine y la impresionante interpretación de Sayyid El Alami.

La Pampa ha sido producida por Agat Films & Cie, y las ventas internacionales de la película corren a cargo de Pulsar Content.

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(Traducción del francés)

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