email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

CANNES 2025 Competición

Crítica: Dossier 137

por 

- CANNES 2025: Dominik Moll se acerca a los secretos sucios de Francia (y a su célebre "semirrevolución"), y acaba retratando algo incómodamente universal

Crítica: Dossier 137
Léa Drucker en Dossier 137

A pesar de haber sido seleccionada para la competición del Festival de Cannes, Dossier 137 [+lee también:
entrevista: Dominik Moll
ficha de la película
]
, de Dominik Moll, parecía el tipo de película que tendría más impacto a nivel local. Cada país tiene su parte de suciedad escondida bajo la alfombra. En este caso, se trata de las consecuencias de las protestas de los chalecos amarillos en Francia, donde un joven resulta, supuestamente, gravemente herido por la policía. Sin embargo, pronto queda claro que no se trata simplemente de un caso local. En primer lugar, porque el movimiento de los chalecos amarillos era imposible de ignorar a nivel mundial, y en segundo lugar, porque algunas de las cuestiones que plantea la película, especialmente las relativas a la brutalidad policial, resuenan en todo el mundo.

Hay otra razón por la que debería funcionar para un público más amplio: resulta muy fácil de ver, aunque es difícil explicar por qué. Las escenas de acción están mayormente narradas, salvo por algún que otro vídeo borroso. Es una película procedimental que se desarrolla en habitaciones lúgubres con mala iluminación o en casas que parecen habitadas. Hay personas sentadas frente a Stéphanie, la investigadora de asuntos internos interpretada por Léa Drucker, que mienten o imploran justicia en medio de un supermercado de una ciudad de provincias. No es precisamente una película para el gran público, pero lo cierto es que funciona muy bien.

“Sabes que no va a cambiar nada”, dice un posible testigo (Guslagie Malanda, a quien vimos en Saint Omer [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Alice Diop
entrevista: Kayije Kagame
ficha de la película
]
) después de que Stéphanie se pase de la raya, otra vez. Si la historia no hiciera referencia a un momento histórico tan concreto, Stéphanie podría engrosar fácilmente la lista de investigadores amargados que no saben cuándo parar, que son tan buenos que cabrean a todo el mundo y, obviamente, tienen que lidiar con complicados problemas personales. Es estimulante ver una película de género ocupando un lugar tan prestigioso en el festival. No obstante, una vez terminada la alfombra roja, Stéphanie se merece su propio espectáculo.

Drucker es una actriz excelente, modesta, que nunca exagera, aunque su personaje sí lo haga. No convierte a Stéphanie en un cliché, sino que le da un corazón y (afortunadamente) tan solo un apasionado discurso que ni siquiera sería necesario. Su trabajo consiste en investigar a sus compañeros, que ya se sienten menospreciados. Está “maltratando” a los héroes del pasado, olvidando que la gente solía aplaudirles después del Bataclan, como indica alguien en la película. La situación ha empeorado hasta tal punto que su propio hijo finge que sus padres no tienen nada que ver con la institución porque “todo el mundo odia a la policía”. Sea cual sea el resultado de su investigación, ella será la mala, ya sea para la familia de la víctima si los agresores salen impunes, para su propia comunidad o incluso para la nueva y agresiva amiga de su ex. No es de extrañar que, en un momento dado, solo vea vídeos de gatitos. Y que adopte a uno.

También hay humor en Dossier 137, que surge de la pura desesperación o de las absurdas declaraciones que escucha Stéphanie, con policías admitiendo haber comprado su equipo “en Decathlon”. La cara de Drucker durante estas escenas merece un premio especial. En algún momento hubo una “casi revolución”, pero es hora de pasar página… Y si eres tú quien estropea la diversión, puedes volver a tus vídeos de gatos.

En un giro tan desgarrador como irónico, dado que se trata de una película que intenta hablar de la justicia o de la total indiferencia de la gente hacia ella, a uno de sus actores secundarios no se le permitió desfilar por la alfombra roja en medio de acusaciones de violación y agresión sexual. Es demasiado pronto para decir qué puede significar este gesto para los grandes festivales o para todo el sector, pero ese “sabes que no cambiará nada” ya suena un poco diferente.

Escrita por Moll y Gilles Marchand, Dossier 137 es una producción de la francesa Haut et Court, coproducida por France 2 Cinéma. Charades se encarga de las ventas internacionales.

(Traducción del inglés)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy