Crítica: Resurrection
por David Katz
- CANNES 2025: La espectacular fuga onírica de Bi Gan quiere resucitar la historia del cine del s.XX, de era en era

Uno de los momentos más fascinantes de la breve pero memorable carrera del director chino Bi Gan fue el estreno local de su segunda película, Largo viaje hacia la noche [+lee también:
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ficha de la película]. A su distribuidor nacional se le ocurrió una gran estrategia de marketing: dar al público la impresión de que se trataba de una historia de amor onírica “apta para parejas” y estrenarla en Nochevieja. La recaudación en taquilla fue un éxito, mientras que la reacción hostil en las redes sociales chinas, indignadas por su incomprensibilidad, tuvo un gran impacto en la campaña.
Por otra parte, se puede decir que el ejército de admiradores cinéfilos de Bi también suspendería un examen sorpresa tras la proyección si se les preguntara por los acontecimientos de sus películas. Disfrutarlas y amarlas, mientras el significado danza quiméricamente fuera del cuadro. La verdad es que no es tan diferente de otro héroe de Cannes, David Lynch, y con el reciente fallecimiento del maestro surrealista, Bi ha regresado en el momento oportuno. La esperada Resurrection [+lee también:
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ficha de la película], que dejó perplejos e hipnotizados a muchos, se ha estrenado en la competición de Cannes, tras haber terminado el rodaje hace solo unas semanas y haberse completado pocos días antes de su presentación.
Bi, un auténtico cineasta “millennial”, nacido en 1989, guarda en la manga su compacto pero rico abanico de influencias. Fiel a la participación de sus coproductores franceses, Resurrection parece una versión aún más desbordante, romántica y pesimista de Holy Motors [+lee también:
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entrevista: Leos Carax
ficha de la película], moviéndose a través de diferentes segmentos con el protagonista, Jackson Yee, como un “Fantasmer” (según el glosario de términos de ciencia ficción inventado por Bi), que adopta varios personajes en niveles oníricos que recuerdan tanto al cine del siglo pasado como a generaciones de la historia moderna china. Shu Qi, actriz habitual de Hou Hsiao-Hsien, es la “Gran Otra”, que vigila los progresos del Fantasmer e intenta salvarlo, aunque es comprensiva con sus incursiones en el mundo de los sueños.
Si los detalles narrativos (e incluso lo que está en juego) de los capítulos iniciales no conectan fácilmente, al menos en un primer visionado, emerge una sensación de inquietante melancolía desde el principio. En la posible línea temporal postapocalíptica del “presente”, los humanos parecen ser inmortales, por la dura concesión de no poder soñar. El Fantasmer ilícito elige soñar y explora tanto el inconsciente individual como el colectivo, mientras acelera el acortamiento de su vida (representado visualmente de forma magnífica como una vela que se derrite) y provoca un “caos” temporal en las épocas visitadas, como un Regreso al futuro vanguardista chino.
De esta forma, el cine mudo, el noir de la época de la guerra, la herencia budista y la paranoia del efecto 2000 al estilo Matrix/Club de la lucha (presente en uno de los planos secuencia característicos de Bi) son atravesados brevemente por el Fantasmer: una indudable “resurrección”, dado que su presencia en la mente de los personajes (y quizá también en la nuestra) corre el riesgo de perderse para siempre. Para resumir Resurrección en un solo elemento: Bi, un joven enamorado de una forma de arte que muchos han proclamado muerta, ha reanimado lo que él considera cine (de hecho, no se ve ningún realismo social), quizá para darle un último adiós a medida que avanzamos por un siglo XXI en el que, como se suele decir, la distopía ya está aquí.
Esta seriedad, sumada a la opacidad de la película, ha decepcionado sin duda a los primeros espectadores, y da pie al escepticismo ante la personalidad artística aún en proceso de maduración de Bi. Con todo, una secta de espectadores que va mucho más allá de este festival inaccesible adorará esta película, y harán diagramas de tramas espaciales al estilo de Mulholland Drive, Memento y Tenet [+lee también:
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ficha de la película]. Adelante, ¡descubrid vuestra Bi-sexualidad!
Resurrection es una coproducción entre China y Francia, producida por Dangmai Films, Shanghai Huace Film Co Ltd y CG Films. Sus ventas internacionales corren a cargo de Les Films du Losange.
(Traducción del inglés)
Galería de fotos 23/05/2025: Cannes 2025 - Resurrection
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