Babylon disease, los ángeles caídos de Estocolmo
por Anne Feuillère
El Festival de la Película Europea de Bruseals permite este año descubrir numerosas películas venidas de Escandinavia e incuestionablemente, uno de las más interesantes es la primera película del joven realizador sueco, Daniel Espinosa.
Vagabundeo urbano, sentimental y existencial, Babylon Disease (Babylonsjukan) se abre sobre imágenes televisivas de manifestaciones y sus represiones. A estas imágenes, reflejo bruto de las convulsiones de nuestra sociedad occidental, sucede en líneas generales el rostro, en un gran plano, grave, desnudo, sin defensa de Maja (Nina Wähä) . La cámara, silenciosamente, sigue su mirada perdida fuera del campo de visión sobre un real que se lee en la gravedad de su cara. Ella, que su amigo echa porque se va a la India, encuentra refugio en la casa de Matthias (Kalled Mustonen), en un apartamento invadido por los amigos de todos los orígenes y los fiestas nocturnas. En la indiferencia devastadora de Mattias y sus amigos, en sus cuerpos llenos de rabia o indolentes, que van sin objetivo, al ritmo de sus placeres, sus denegaciones o sus locuras (secuestrar al jefe del partido político de la extrema derecha sueca, por ejemplo...), Maja encuentra un eco a su desasosiego. Con seriedad pero no sin humor, Babylone Disease rueda este desacuerdo profundo entre nuestras aspiraciones y lo real , allí donde se instala el dolor y la melancolía. La película de este alumno de la Danish Film School es producida por Lars Lindström para Nordisk Film Production AB (SE), con el Danish Film Institute y el Swedish Film Institute. Vendido por Nordisk Film, ya se estrenó con éxito en los países escandinavos y en Europa del este.
[Leer la entrevista de Daniel Espinosa]
(Traducción del francés)
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