06/09/2005

El actor francés Eric Caravacaque firma con Le Passager [+lee también:
tráiler
ficha de la película] un primer largometraje muy remarcado en la Semana de la Crítica veneciana, gana la apuesta de su pasaje detrás de la cámara. Protagonista de su película al lado de Julie Depardieuy de un prometedor Vincent Rottiers, el neo-cineasta de 35 años libra una obra oscura y realista, caracterizada por un estilo de exploración de las emociones muy próximo al de Patrice Chéreau que lo reveló al público con Son Frère (2003). Adaptación de una novela de Arnaud Catherine (La route de Midland) que co-escribió la adaptación con el realizador y con Laurent Perreau, Le Passager analiza con agudeza el impacto de un suicidio entre los allegados del muerto: el pasado resurge , los resentimientos se mezclan al amor en una mezcla introvertida, y el futuro se dibuja con dolor mientras que se saldan las cuentas del pasado.

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Siguiendo los pasos de Thomas (Eric Caravaca), un joven de unos treinta años que acaba de ser padre, la película empieza por un grito de niño desgarrador, luego un pasaje a la morgue donde yace el cuerpo de su hermano mayor Richard con quien no tenía ningún contacto y que acaba de ahorcarse. De vuelta en la pequeña ciudad al borde de mar donde crecieron, Thomas pone en venta la casa familiar y se instala en un hotel gestionado por una mujer (Julie Depardieu) y su hijo adoptivo, un adolescente (Vincent Rottiers), que amaron a su hermano antes de que este último huya. Pero Thomas no les revela ni quien es, ni la muerte de Richard, escuchando sus confidencias sin concederles la menor información. Una actitud alimentada de amor y odio por este hermano fantasma que encontrará su explicación en un secreto del pasado. Muy controlado a nivel formal con una luz que explora las caras en la oscuridad (fotografía de Céline Bozon) y decorados naturales que refuerzan el clima de aislamiento emocional en el cual viven los personajes, Le Passager se distingue también por la calidad de su interpretación, incluidos los papeles secundarios como Maurice Garrel y Nathalie Richard.

Producido por Michel Saint-Jean para la sociedad Diaphana (que va también a distribuirlo en Francia), el primer largometraje de Eric Caravaca benefició de un presupuesto de 1,27 millones de euros, incluyendo 420 000 euros de avance sobre los ingresos del Centre Nacional de la Cinematografía, 450 000 euros de Arte France Cinémay una ayuda de la región Paca. Las ventas internacionales son aseguradas por Celluloïd Dreams.

(Traducción del francés)