24/02/2006

En el 2004 los espectadores franceses han visto en las televisiones publicas 4.638 horas de documentales, lo que representa el 17,6 de la programación, mientras que los italianos tuvieron que contentarse con 1.223 horas, o sea el 4,6 de la programación de la RAI, de los cuales el 84% son documentales comprados y no producidos en Italia.

Estos datos desmoralizantes fueron dados a conocer ayer por la noche durante el convenio sobre el B>mercado del documental en Italia organizado por Doc/It -Associazione documentaristi italiani con la Rai y la Dirección General Cine del Ministerio de la Cultura. Según una investigación dirigida por el Instituto Italiano para la Industria Cultural - IsiCult, en el 2004 la facturación del sector documental sumaba 50 millones de euros, con 250 empresas incluidas y cerca de 3000 ocupados. En este escenario la Rai ha investido en el documental solo el 0,5 de su presupuesto, con sus tres redes públicas.

Las tres redes privadas Mediaset han hecho peor que la Rai, programando en el 2004 solo 278 horas de documentales, de los cuales solo 10 producidos en Italia. En el mismo año todas las televisiones francesas (entre públicas, privadas, temáticas y por satélite) han investido en los documentales 145 millones de euros, de los cuales 65 provenientes de financiaciones públicas, mientras que la inversión francesa total (no solo relativa a las televisiones) en la producción de documentales fue de 308 millones de euros, frente a 625 millones en la ficción.

Signos de esperanza llegan del director general Cine Cinema Gaetano Blandini, para el cual la nueva "Ley Urbani" ha dado finalmente derecho de ciudadanía al documental en el sistema de financiación publica: a eso fue destinado el 5% del presupuesto estatal.