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FESTIVALES Polonia

Krauze y Guziński, cine sin mentiras

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Indudablemente, uno de los candidatos al León de oro de la 31° edición del Festival de Cine Polaco de Gdynia es Plac Zbawiciela (Saviour Square) de Krzysztof Krauze et Joanna Kos-Krauze. Después del éxito internacional de Mój Nikifor (leer la news del 18 octubre del 2005), Krauze propone un título marcado por una similitud con su drama Dług (La Dette - lit. "La deuda") realizado en el 1999.

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Como para su precedente filme, los Krauze se inspiran aquí también de la historia auténtica de personajes ordinarios. Pero contrariamente al filme del 1999, donde la crisis que llevaba a una catástrofe venia del exterior, Plac Zbawiciela evoca el drama interior de los personajes. Una familia polaca, con dos hijos, vive en la casa de la madre del marido (Arkadiusz Janiczek) antes de mudarse al nuevo apartamento aun en construcción. Pero el promotor inmobiliario a quien la pareja ha confiado todas sus economías cayó en bancarrota. Este incidente revela las fallas de los personajes. El fin de los sueños y de toda esperanza lleva a la joven madre (Jowita Budnik) a una depresión profunda y al aislamiento, fuente de gestos definitivos.
El filme, producido por Zebra Film Productions, en coproduccion con TVP y CanalPlus Polonia, y con la ayuda de la Agencia de apoyo a la producción, ha recibido muy buenas criticas de la prensa después de su estreno el 9 de septiembre.

Otro punto fuerte de la competición oficial, Chłopiec na galopującym koniu (The Boy on a Galloping Horse) de Adam Guziński. Este joven realizador, que firme aquí su primer largometraje, fue laureado con el primer Premio de la Cinéfundation del Festival de Cannes en el 1998 por su cortometraje Jakub. Crea aquí un universo minimalista en el cual Jerzy (Piotr Bajor) es un escritor en total falta de inspiración que ve a su mujer (Aleksandra Justa) sufrir también y alejarse poco a poco de él. En un segundo plano está su hijo Jasiek (Krzysztof Lis) cuya enfermedad deja huellas imborrables en sus padres y marca visiblemente su relación de pareja. Esta obra simple, silenciosa, retratada con una especie de raro lirismo en el cine polaco contemporáneo, vale la pena de ser apreciada.
El filme producido por Piotr y Łukasz Dzięcioł de Opus Film, recibió el apoyo del programa MEDIA Plus de la Unión europea y es coproducido por TVP con la participación financiera del Instituto Polaco de Cine (PISF).

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(Traducción del francés)

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