26/09/2006

Marek Madaric está preparado para entrar en un territorio donde ningún otro eslovaco ha entrado hasta ahora en este milenio. El recién nombrado ministro de Cultura de Eslovaquia, ha declarado que su objetivo es alcanzar, en cuanto a producción cinematográfica original del país se refiere, la cifra, impensable previamente, de 10 películas para 2008.

En otros países europeos, esta cifra podría sonar a chiste pero, en Europa Central, el objetivo es serio. Desde el año 2000, los cineastas eslovacos han contribuido a conseguir una media de seis películas, de las cuales, una media de dos al año eran producciones eslovacas originales. En 2006, no ha habido una sola cinta eslovaca producida en su totalidad por fondos nacionales.

“Es de crucial importancia un acercamiento común del Gobierno, los productores y la televisión si queremos que las películas eslovacas vuelvan a encarrilarse”, según palabras de Madaric citadas por la prensa del país. Actualmente, el ministro prepara una nueva ley sobre subvenciones culturales del Gobierno que proporcionarían más facilidad a los cineastas para recibir subvenciones del Estado, pero su principal objetivo es que la televisión pública eslovaca (STV) “vuelva a seguir la pista de la coproducción cinematográfica”.

La STV era el socio principal de los cineastas pero, desde 2003, no se compromete seriamente en la coproducción. Se dice que Madaric, ex Vicepresidente de la STV y dramaturgo, la ha convencido para que facilite algo menos de un millón de euros para apoyar cuatro películas en los próximos meses. Y el próximo año, llegarán más cosas.

Los productores eslovacos ven esto como un desarrollo positivo. “La ayuda de la STV es esencial, pues nos ayuda a pedir también apoyo a la Unión Europea”, explica Patrik Pass, Presidente del SAPA (Productores eslovacos del audiovisual). “Si no conseguimos renovarnos, seguiremos estando en el fondo de Europa [con respecto a la inversión en cine]”.

(Traducción del inglés)