10/09/2007

El cine estonio goza, definitivamente, de una buena racha en los festivales, dándose a conocer por todo el mundo. En Venecia, ha sido Veiko Õunpuu el encargado de conquistar al jurado de la sección Horizontes, dedicada a nuevas tendencias cinematográficas, que le ha otorgado el máximo galardón además de un atractivo premio en metálico de 20.000 euros.

"Esto me hará la vida más fácil", comentaba Katrin Kissa, productora de la película para Kuukulgur Film, en coproducción con Homeless Bob Production y Tugev Tuul Films en Estonia. "La cinta se estrenará en cuatro salas nacionales –un buen número de copias para Estonia-, y espero que este premio sirva para atraer a la gente". La película aún no dispone de agente de ventas.

Autumn Ball [+lee también:
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ficha de la película] presenta momentos escogidos de la vida de seis personas que residen en torres de pisos de una enorme conurbación construidas durante la era soviética. El director describe la película como “una comedia negra sobre soledad, desesperación y esperanza”. Del papel principal se encarga el polifacético actor Rain Tolk, Shooting Star estonia en 2007.

Kissa, quien también trabajó con Õunpuu en su aclamado mediometraje Empty, se encargará de reunir la financiación para su segundo largometraje, Temptation of St Tony, que espera coproducir con Suecia. "Nos conviene coproducir con nuestros vecinos nórdicos", afirma.

Otros cineastas estonios seleccionados y/o premiados en algún festival este año incluyen a Ilmar Raag, doble ganador en Karlovy Vary el pasado mes de julio por The Class [+lee también:
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ficha de la película], y a Kadri Kõussar, seleccionado en la sección Una Cierta Mirada de Cannes 2007 por Magnus.