13/09/2007

Romolo Augusto no es un simple muchacho, sino el último emperador romano. Se sabe poco de su historia, solamente que reino durante un tiempo breve, hasta que Odoacro lo emprisiona en Capri. Que fue lo que sucedió al joven emperador romano nadie lo sabe. El escritor Valerio Massimo Manfredi imagina cual habría podido ser su destino. Lo hace en un libro, "L'ultima Legione", publicado en 44 países, que Doug Lefler ha transformado en un filme épico.

Producido por Raffaella y Marta De Laurentis, Tarak Ben Ammar y Harvey Weinstein (productor ejecutivo), L’ultima Legione, una exclusividad para Italia de Rai Cinema, sale hoy en 250 salas. El filme es una adaptación libre del libro, donde la historia de Romolo Augusto (Thomas Sangster), se mezcla ya sea a acontecimientos históricos, o al mito. Ben Kingsley es Ambrosino, el chamán tutor del joven Cesar. Colin Firth, en cambio es Aurelio, el comandante de la cuarta legión invicta, encargado de defender al emperador de Odoacro (Peter Mullan) y conducirlo sano y salvo a Bretania. A su lado también la bellísima Aishwarya Ray, que interpreta a la guerrera Mira.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

"Claro que mi Aurelio es un poco más rígido que el personaje interpretado por Firth - cuenta Valerio Massimo Manfredi, que ha trabajado sobre el sujeto del filme, incluso si ha frecuentado poco el plató-. El mío es un héroe trágico que cree firmemente en un mundo que esta viniéndose abajo y habría dado vida a un filme diverso. Ben Kingsley, en cambio, interpreta a la perfección el papel de Ambrosino, así como Thomas Sangster en el papel del Cesar niño. Me acuerdo aun cuando sobre el plató le enseñaba a leer en latín la profecía de la espada, "Un corte para defender, uno para vencer, por la mano de aquel que está destinado a reinar”. Una vez mas en el centro de la historia está el mito de Excalibur, la espada mágica. "El mito es una creación potente - explica Manfredi -. Tan potente que llega a ser inmortal. Es este el secreto de su éxito también en el cine, donde crece cada vez más el deseo de mitos. Creo que la gente actualmente se siente perdida en esta sociedad donde se es humillado en su individualidad. Pero no perdamos de vista que en el fondo de cada uno se esconde siempre un héroe".