14/11/2007

Las organizaciones profesionales de la industria cinematográfica francesa se han unido para encontrar una solución técnica con el fin de encauzar la piratería de las películas, que “corre el riesgo de alterar duraderamente la diversidad y el dinamismo del cine en nuestro país, que pesa cada vez más en su economía y supone un obstáculo al éxito de las ofertas legales” (leer la noticia). En un comunicado común, el Blic (la oficina para las relaciones de la industria cinematográfica) y el Bloc (la oficina para las relaciones de las organizaciones de cine) han decidido tomar la iniciativa “ante la falsificación masiva de las obras cinematográficas en las redes digitales y ante la pasividad de numerosos operadores de Internet. “

Las dos organizaciones piden “que se constituya ante un organismo habilitado una base de datos que contenga las fuentes digitales de las obras, necesarias para la creación de las huellas digitales de las películas para los operadores de Internet, en particular, los actores de Web 2.0” (paginas web que comparten vídeos). “Esta base de datos permitirá poner las huellas digitales a disposición de los operadores de Internet para que cumplan con su obligación de identificar el contenido ilícito que transportan o albergan. “

El Blic reúne, entre otros, a la Asociación de Productores Independientes (API), a la Federación de Industrias del Cine, Audiovisual y Multimedia (Ficam), a la Federación Nacional de Cines Franceses (FNCF) y a la Federación Nacional de Distribuidores de Películas (FNDF). Por su parte, el Bloc representa, en particular, a la Asociación de Productores de Cine (APC), al Sindicato de Productores Independientes (SPI), a la Sociedad de Realizadores de Películas (SRF), a la Unión de Productores de Películas (UPF), a los Distribuidores Independientes Reunidos Europeos (Dire) y al Sindicato de Productores de Películas de Animación (SPFA).

(Traducción del francés)