16/05/2008

Un oso, sacerdotes nudistas, setas alucinógenas, un monje tibetano, una cambio de sexo, un masaje al chocolate y una sesión de puenting: Le voyage au Pyrénées [+lee también:
tráiler
ficha de la película], de los hermanos Arnaud y Jean-Marie Larrieu, ha llevado esta tarde la Quincena de los Directores a un universo de absurdo sentido del humor, algo bastante extraño en el Festival de Cannes. Una aventura hecha a la medida para dos actores como Sabine Azema y de Jean-Pierre Darroussin, que disfrutan del majestuoso decorado que es la cadena montañosa pirenaica.

El guión, escrito por los dos hermanos, trata de una pareja de célebres actores (Aurore Lalu y Alexandre Dard) que llegan a pasar sus vacaciones en un pueblecito. Rápidamente la (patética) prensa regional revela su presencia, que tiene por objetivo el aislamiento para luchar contra una crisis de ninfómana de Aurora. Pero de baladas en asno a excursiones pedestres, las vacaciones se convertirán rápidamente en un delirio absoluto a pesar de los esfuerzos de Alexandre para que su compañera vuelva en sí. Ya que “las actrices no son mujeres como las otras”, un poco como el oso (fantasmagórico y erótico, inspirado por The Beast de Walerian Borowczik) del proverbio local: “se sabe que está por allí, pero no se sabe exactamente dónde”. Una definición que se aplica también a la película del Larrieu, que no retrocede ante ninguna situación risible o diálogo absurdo, mostrando la ridiculez de los ciudadanos, enfrentados a la naturaleza, y la de actores conocidos, oscilando entre el exhibicionismo y la necesidad de ocultarse para solucionar sus problemas personales. Una receta de pareja muy experimental en una región donde “se temen tres cosas: Dios, las tormentas y las avalanchas. “

Producida por Soudaine Compagnie con el apoyo de Canal + y de TPS Star, Le voyage aux Pyrénées, que será distribuido en Francia por Diaphana Distribution, tiene a Celluloid Dreams como agente de ventas internacional.

(Traducción del francés)