20/11/2008

El director del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, Mikel Olaciregui, y cinco miembros de su equipo han emitido un comunicado de prensa en el cual afirman que sólo seguirán en sus cargos si las aportaciones económicas de las instituciones “permiten celebrar un festival en las condiciones necesarias” en un momento en que “decidirán su contribución a los presupuestos”.

Ante la perspectiva de una serie de recortes por parte de los organismo públicos, cuyo primer ejemplo ha sido la reducción de 90.000 euros en la contribución de la Diputación Foral, el equipo directivo ha sido claro y amenaza con abandonar la organización. En principio, el resto de entes implicados, Ayuntamiento de San Sebastián, Gobierno Vasco y Ministerio de Cultura, han mostrado su intención de congelar las partidas.

Además, la dirección del festival ha manifestado su comprensión por el delicado momento económico y por ello ha comenzado a estudiar “la adopción de una serie de medidas que adapten los presupuestos del Festival a la situación de crisis general que estamos padeciendo”.

Con este comunicado el festival sale también al paso de una serie de informaciones sobre la financiación que la organización considera inexactas. De hecho, ha anunciado que las dos últimas ediciones, han acumulado poco menos de un millón de euros de déficit pero “ha sido absorbido por el propio festival sin que haya sido necesaria ninguna aportación adicional o extraordinaria por parte de las cuatro Instituciones Socias”.

Por último, se ha incidido en la autofinanciación del festival, que en 2008 ha llegado al 48% de la totalidad del presupuesto, un 23% más con respecto al año anterior.