La relación entre Sélima, una joven enfermera de orgigen argelino, y Esther, una anciana judía originaria de Orán, paralizada de los miembros inferiores y encerrada en el recuerdo de la Argelia de su juventud. A pesar de las dudas del hijo de Esther, la corriente pasa entre las dos mujeres a tal punto que la propia madre de Sélima, Halima, acepta ocuparse todo el tiempo de la anciana de carácter difícil. Una experiencia que pondrá en prueba sus prejuicios mutuos que se transformarán en un interés recíproco que desencadenará comentarios mal intencionados por parte de algunos vecinos musulmanes.