20 centímetros
Tráiler
de Ramón Salazar
Marieta quiere dejar de una vez de llamarse Adolfo. Llamarse como su padre y tener los mismos veinte centímetros le produce repelús. Marieta quiere llamarse Marieta y ser una mujer respetada con todas las de la ley. Sufre Marieta de narcolepsia, la enfermedad del sueño y siempre se queda dormida en el momento menos oportuno. Pero en sus ataques de sueño, que dan origen a los números musicales, Marieta canta maravillosamente y habla idiomas. Hoy Marieta se ha despertado tirada en un descampado a cuarenta kilómetros de Madrid.