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LOCARNO 2015 Competición

O futebol: todo sobre mi padre

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- LOCARNO 2015: Esta película española, presentada a concurso en Locarno, mantiene un complicado equilibrio entre realidad y ficción a partir del encuentro real del director con su padre

O futebol: todo sobre mi padre

El paradigma de un partido de fútbol trasladado a una película: así es como Sergio Oksman, autor de O futebol [+lee también:
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entrevista: Sergio Oksman
ficha de la película
]
, describe su trabajo: un campo simétrico, dos actores (equipos) y que empiece lo imprevisible del desafío, ya sea en el ámbito del Mundial de fútbol o para reunirse con un padre al que no ve desde hace 20 años. 

La película española, presentada como parte de la competición por el Leopardo de Oro del 68º festival de cine de Locarno, parte de la idea de un padre y un hijo que siguen juntos el Mundial de fútbol de 2014, disputado en Brasil. Sergio se reúne con su padre, Simão, en 2013 en São Paolo tras veinte años en lontananza. Es el encuentro entre dos extraños que se ven las caras justamente en ese “terreno” común en el que estar frente a frente. 

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O futebol lleva a cabo un complicado equilibrismo entre la realidad y la ficción a partir del verdadero encuentro entre el director y su padre. El guion de Sergio Oksman y Carlos Muguiro está escrito como pura ficción: el viaje (muchas escenas se ruedan desde un coche) interior y futbolístico de un padre y un hijo, pautado por el calendario de los partidos. “Optamos por usar la ficción para relatar mejor la realidad”, ha declarado el guionista Muguiro en rueda de prensa. 

Pero, al igual que el fútbol, la realidad es imprevisible: durante el rodaje de la película, Simão va al hospital por un malestar y muere al cabo de pocos días. La cinta permanece anclada en la estructura artística original, entremezclando la desaparición del padre con la vergüenza nacional tras el 7-1 de Alemania a Brasil.

Como explica el director: “el montaje del material rodado supuso un trabajo extremadamente delicado; tuvimos que dejarlo sedimentar durante meses, de manera que pudiéramos tener una mirada completamente libre de mi experiencia personal”.

El partido termina con la desaparición de uno de los candidatos, el hijo conduce solo, rompiendo la simetría por el vacío del habitáculo del padre, en una São Paolo fantasma desprovista de la poesía del fútbol, capaz únicamente de alegrarse por la derrota de la odiada Argentina.

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(Traducción del italiano)

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