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SOLEURA 2016

Democracy desvela el lado oculto del impersonal Parlamento Europeo

por 

- La cinta David Bernet sorprende al público de las Jornadas de Soleura tanto en su forma como en su contenido

Democracy desvela el lado oculto del impersonal Parlamento Europeo
Una escena del film Democracy

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tráiler
entrevista: David Bernet
ficha de la película
]
, del suizo David Bernet, compite por el prestigioso Premio de Soleura tratando de hacer lo imposible: devolver no sólo la crecibilidad sino incluso cierto glamour perdido a ese complejo artilugio que es el Parlamento Europeo.

No cabe duda de que el tema que David Bernet ha decidido abordar no es el más apetitoso, por no decir sexy. Meterle mano (o, en este caso, teleobjetivo) a ese mecanismo complejo que son las instituciones europeas exige un excelente espíritu de síntesis y una mirada nueva y dinámica capaz de captar los pequeños centelleos de humanidad que alimentan un fuego que parece haberse extinguido del todo. El ángulo de ataque por que ha optado el director es la cuestión espinosa, titánica y a la vez intrigante de la protección de datos, permitiéndole en cierto modo de dorar desde el principio la píldora.

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Durante dos años y medio, David Bernet ha seguido el procedimiento legislativo hasta obtener un documental extremadamente cautivador que se asemeja a un manual de instrucciones para penetrar en los meandros de un universo aparentemente inaccesible. Las intrigas, los éxitos y las inmensas desilusiones que se viven dentro del Parlamento Europeo parecen, como por arte de magia, tomar forma frente a nuestros ojos, devolviendo un hálito de vida a ese misterioso paquidermo que parasita el centro de Bruselas. A través de la vida cotidiana del joven eurodiputado Jean Philipp Albrecht y su colorido equipo, apoyado por la igualmente carismática comisaria Viviane Reding, David Bernet arroja luz entre las bambalinas de un mundo que para muchos no es más que fantasía. Este constante ir y venir entre lo interno (los laberínticos pasillos y las salas del Parlamento) y lo externo, entre lo público y lo privado, constituye el centro del debate sobre la protección de datos y, consecuentemente, domina la película de principio a fin.

Si, por un lado, el blanco y negro de las imágenes hace que la realidad sea menos palpable, más impersonal, por otro, los breves instantes de “normalidad” que se insinúan en la máquina legislativa (el comer discretamente un bocadillo, el tratar de hacerse bien el nudo de la corbata…) recuerdan una humanidad espantosamente real. Mientras “espía” lo que se trama entre las paredes del Parlamento, David Bernet no se olvida de referirse a nuestra vida cotidiana a través de los rumores que penetran los ventanales, el sol que desde fuera calienta las salas, la vida misma. Al contrario que la vigilancia masiva, contra la que Jean Philipp Albrecht pelea y que no se interesa lo más mínimo en nuestra especificidad, el ojo del director trata de identificar la individualidad en el interior de un mecanismo demasiado complejo para parecer real. El espectador se deja sorprendentemente capturar por el movimiento, por la exaltación y, también, por el miedo al fracaso que se cierne sobre el grupo de Albrecht. Con ellos duda, espera y sueña con una democracia europea que parece estar, por fin, (casi) al alcance de la mano. David Bernet esquiva la trampa de la vulgaridad y nos regala una película inesperada, inteligente y extremadamente humana.

Democracy - Im Rausch der Daten es una producción de Indi Film GmbH y Seppia.

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(Traducción del italiano)

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