14/03/2006

Las producciones y coproducciones húngaras rodadas en el territorio húngaro en el 2005 han estado respaldadas por el Estado con la cifra de 14,3 millones de euros, gracias a 3,18 M€ bajo forma de ayudas directas y 11,14 M€ en forma de deducciones fiscales, lo que representa un total que cubre alrededor de un 16% de los gastos de producción (88,7 millones de euros). Sin embargo el atractivo del sistema de incentivos fiscales puesto en marcha en el 2004 y generador de un desarrollo sin precedente de las coproducciones internacionales, va a ser disminuido a partir de abril para ajustarse a las normas de la Unión Europea: el apoyo público (directo e indirecto) no podrá superar más de un 50% de los costos de producción de las películas húngaras.

La industria cinematográfica húngara conoció en el 2005 una evolución paradójica, el dinamismo de la producción contrasta con una caída de la frecuentación (10,8 millones de entradas contra 13,5 millones en el 2004), una explosión de la piratería que representaría un 73% de las ventas de películas al detalle, y los cierres de salas de cine. Sin embargo, la cuota de mercado de las películas nacionales aumenta en un 12%. El año pasado, dos producciones húngaras entraron en el Top10 dominado por Star Wars 3 y sus 715.000 espectadores: Fateless [+lee también:
tráiler
ficha de la película] de Lajos Koltai (7° con 450.000 espectadores) y One Skirt and a Pair of Trousers de Barna Kabay (8° con más de 250.000 entradas). Entre los otros éxitos magiares 2005, es necesario también indicar la presencia de Just Sex and Nothing Else de Krisztina Goda (ver el artículo) y de Black Brush de Roland Vranik (leer elinterview), algunos primeros largometrajes que ofrecen ventajas suplementarias a la seductora nueva ola húngara (Benedek Fliegauf, György Pálfi, Nimrod Antal, Ferenc Török Szabolcs Hajdu, Kornél Mundruczó, Áron Gauder...).

(Traducción del francés)