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VENECIA 2023 Orizzonti

Crítica: Behind the Mountains

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- VENECIA 2023: La misteriosa y sugerente nueva película del director tunecino Mohamed Ben Attia te hará creer que un padre puede volar

Crítica: Behind the Mountains
(i-d): Majd Mastoura y Walid Bouchhioua en Behind the Mountains

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parece la culminación de una trilogía informal dirigida por Mohamed Ben Attia, iniciada con Hedi, un viento de libertad [+lee también:
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, premiada en Berlín en 2016, y seguida por Dear Son [+lee también:
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, estrenada en la edición de 2018 de la Quincena de los Realizadores. En las salas de cine, e incluso en los festivales, proyectar estas películas juntas podría ser la forma más adecuada de presentarlas. Ambientadas firmemente en la vida tunecina contemporánea, y con historias que se desarrollan en un lapso de tiempo reducido, estas obras son capaces de transmitir con fuerza las principales características y las grietas de este país norteafricano, huyendo siempre del didactismo.

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Este último largometraje, que ha tenido su estreno dentro de la sección Orizzonti de Venecia, es el menos convencional, y posiblemente el más gratificante, aunque su fuerza y su sentido de la lógica afloran algo tarde, tras un comienzo (¿intencionadamente?) inestable. Hay una sensación de “escritura automática”, donde las imágenes del subconsciente de Ben Attia salen a la superficie y se organizan en sugerentes patrones. El director también parece meditar sobre las convenciones del austero cine de autor europeo de los 2000: hay un tenso y prolongado allanamiento de morada y, en otro lugar, un hombre decide lanzarse a volar, suspendido mágicamente sobre el paisaje oscilante como los protagonistas de las primeras obras de Bruno Dumont.

Las tensiones actuales en la sociedad tunecina, vinculadas a las consecuencias entrópicas de la Primavera Árabe y la potencial amenaza del extremismo religioso, son el principal motor de la trama. En secuencias elípticas que acaban en bruscas transiciones a negro, Rafik (Majid Mastoura) comete una serie de actos de vandalismo aleatorios y psicóticos en lo que parece ser su antiguo lugar de trabajo, una oficina diáfana de aspecto moderno. Es encarcelado durante cuatro años (durante los cuales intenta suicidarse, arrojándose dramáticamente por la ventana de un último piso), tras lo cual regresa a Túnez para secuestrar a su brillante hijo Yassine (Walid Bouchhioua), criado por su madre soltera y sus abuelos paternos. A continuación, huye de la ciudad con el niño en dirección a una cadena montañosa próxima, fotografiada con gran maestría, donde demuestra lo que parece ser su don para el vuelo acrobático (una idea que resultaría más interesante si ocurriera de verdad, en lugar de explorar otra percepción subjetiva).

Para que todo resulte un poco más terrenal, se suma a ellos un pastor local (Samer Bisharat), que abandona a su numeroso rebaño de ovejas para unirse a este “profeta”. Este inusual grupo de pasajeros, que avanza en coche por el valle, se parece un poco a una familia adoptiva con dos padres. En busca de refugio, pronto deciden tomar como rehenes a una agradable familia “nuclear” de clase media-alta, que vive en una gran casa en los alrededores, compuesta por los padres, Najwa (Selma Zghidi) y Wejdi (Helmi Dridi), y su igualmente precoz hijo Oussama (Wissem Belgharak), en un evidente “reflejo” de guion. A partir de ahí, todo deriva en un largo y tenso drama de cámara, que comienza de forma un tanto genérica, pero que acaba desarrollando un sentido meditativo del ritmo.

La sensación de que estamos ante un cuento popular, o una parábola instructiva contada por un educador religioso, emerge como una mariposa de una trama plagada de peligros, que evoca los trabajos de Haneke o Reygadas. La película transmite con gran delicadeza y habilidad la innegable imagen de un país al borde del precipicio, que alberga todo tipo de energías negativas y vitales.

Behind the Mountains es una coproducción entre Túnez, Bélgica, Arabia Saudí y Catar, producida por Nomadis Images, Les Films du Fleuve, Tanit Films y 010 FILMS. Luxbox se encarga de las ventas internacionales.

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(Traducción del inglés)

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