En una estación de esquí, una mañana fría, lejos de sus compañeros, Alice se sale de la pista y tiene un grave accidente rompiéndose una pierna. Tras el accidente, Alice permanece sola e incapaz de moverse. Por otro lado, el inteligente Mattia tiene una hermana gemela, Michela, que es retrasada, lo que inhibe a Mattia frente a sus compañeros. Cuando uno de ellos los invita a ambos a una fiesta, Mattia deja a su hermana en un parque con la promesa de que regresará pronto a buscarla. Estos dos episodios marcarán las vidas de Alice y de Mattia, que un día se cruzarán. Se sentirán estrechamente unidos al mismo tiempo que igual de divididos. Las vidas de Alice y Mattia son como los números primos gemelos, como el 11 y el 13, el 41 y el 43. Son parejas de números que están casi juntos pero entre ellos existe siempre un número par que les impide tocarse. Eso mismo es lo que piensa Mattia en relación a Alice: sus vidas son como esos números primos y que ellos son como primos gemelos, fuertemente unidos en su soledad, pero con la imposibilidad de tocarse.